La policía canadiense ha arrestado a 17 jóvenes sospechosos de hacking
La policía canadiense ha desmantelado una red de hackers que se habían introducido en más de un millón de ordenadores de todo el mundo para robar datos personales gracias a los que han conseguido 31 millones de euros.
Los arrestados han sido 17 jóvenes con edades comprendidas entre los 17 y los 26 años. Los presuntos delincuentes informáticos tenían acceso a los ordenadores de más de 100 países de casi todos los continentes.
El proceso empleado era la introducción de virus informáticos, especialmente troyanos y gusanos, en los ordenadores para convertirlos en zombies o bots. De esta forma, conseguían controlarlos remotamente sin que los dueños fueran conscientes.
El objetivo de estos presuntos estafadores era conseguir dinero mediante la técnica de phishing, práctica por la que consiguen las claves para entrar en las cuentas bancarias de los clientes, mediante el envío masivo de correos y la suplantación de páginas webs de entidades financieras.
La investigación comenzó en el verano de 2006 a raíz de las quejas de varias empresas, instituciones gubernamentales y usuarios individuales. Incluso, la policía canadiense ha informado, aunque sin especificar, que varios ordenadores gubernamentales estaban infectados.
Los 17 arrestados han sido acusados de cargos como obtención ilegal de datos, hacking y posesión de contraseñas para cometer estafas. Las penas máximas a las que se enfrentan son de 10 años.